domingo, 1 de febrero de 2009

El corazón

Ojala fuese posible timbrarle al corazón
Hacerle una colgada con número privado
“Estoy pensando en vos”
O mandarle simplemente un SMS
Texto: “te sigo amando, siempre te amé”
Atentamente el corazón fulano de tal.

Ojala pudiera mandarle un zumbido
“Ana le ha enviado un zumbido”
Despertá! Soy yo extrañándote
O mandarle simplemente un guiño
Un loco chispazo que titule: “Así brillaba yo”
La lúcida que alucina con tenerte.

Ojala el corazón aceptase el formato mp3, jpg, avi
Le mandaría canciones, fotos y videos de nuestros recuerdos
Que lo hagan estremecer… “¿cuando paso eso?”
O simplemente le mandaría un gif
“Bienvenido a casa príncipe!”
Una niñita loca bajando como loca a abrazarte

Ojala el corazón fuese lo que uno quiere de él
Un aparatito programable, pro felicidades
Poderlo apagar cuando llegan las tristezas
O simplemente armarle un detector de variaciones
“Me encantaría saber que te hace feliz, mi bien”
Pero el corazón es como es, a veces ciego, sordo, manco.

Es así, el corazón no recibe tales cosas
Ni mails, ni llamadas, ni programaciones telepáticas.
Anda en otras épocas, customizado en antaño
O simplemente no quiere modernidad, solo amor.
“si pudieras ver como mi corazón muere por darte amor”
Este corazón dejo lo que es un día y vuelve hoy a serlo por ti.

2 comentarios:

Marco dijo...

Wow, recién me entero anita de que tienes esa abrumadora manera de escribir... feliciades, realmente lo haces bien, voy a venir a visitarte más seguido, jeje, bello poema, bello.

Ana Pintado dijo...

Gracias Marcos.. es siempre lindo recibir visitas y comentarios. Hacen bien al corazon y al ego :D. Un abrazo...